Hours: Monday to Friday from 9:30 to 20:30 / Saturday from 10 to 20.30 / Sunday and Holidays from 11:30 to 14:30 & 17:30 to 20:30 Pau Claris 144 Barcelona - 93.317.25.27 - correu@documenta-bcn.com
«A raíz del suicidio de mi madre, Sylvia Plath, el 11 de febrero de 1963, a mi padre, Ted Hughes, le costaba asentarse. Su estilo de vida itinerante implicaba que mi modesto armario y mis libros (no tenía juguetes) nunca estaban en un único sitio, y tampoco podía hacer amigos (no tenía amigos de ver...
«A raíz del suicidio de mi madre, Sylvia Plath, el 11 de febrero de 1963, a mi padre, Ted Hughes, le costaba asentarse. Su estilo de vida itinerante implicaba que mi modesto armario y mis libros (no tenía juguetes) nunca estaban en un único sitio, y tampoco podía hacer amigos (no tenía amigos de verdad). Adondequiera que él fuera, mi hermano Nick y yo lo acompañábamos como dos apéndices a remolque. Si apartaba la vista apenas un instante y luego volvía a mirar, el paisaje se habría modificado y a mí no me quedaría más remedio que aclimatarme a un universo nuevo». Así explica Frieda Hughes su anhelo de arraigo, de plantas y animales, de una compañía cálida y amable, pues, para tener plantas y animales, hace falta un hogar, una tierra que nos ancle, un jardín que cultivar, que ver crecer, un lugar estable que sea morada y cobijo. Cuando por fin lo logró, cuando compró una vieja casa destartalada en lo más profundo de la campiña galesa con la idea de rehabilitarla, esperaba emprender algunos proyectos: plantar un jardín, pintar y escribir su columna de poesía para el Times. En lugar de eso, se encontró rescatando a una cría de urraca, la única superviviente de un nido destruido por una tormenta. Poco a poco, George, la urraca, pasa de ser una bola de plumas y huesos que grita exigiendo comida a convertirse en un compañero inteligente y muy rebelde que destroza la casa, aterroriza a la señora de la limpieza y contribuye a hundir el matrimonio en crisis de Hughes. Y, sin embargo, es imposible evitar enamorarse perdidamente de él. Frieda, cautivada, teme lo que sucederá cuando llegue el momento de liberarlo y acaba embarcándose en una obsesión que cambiará el curso de su vida. Con un sentido del humor, una humanidad y una ternura irresistibles, Frieda Hughes nos invita a acompañarla en su insólito viaje hacia la alegría y los vínculos. Una prueba más —si cabe— de que conectar con la vida salvaje tiene el poder de relativizar los problemas, enseñarnos lecciones fundamentales y proporcionar consuelo a almas heridas.
This website stores data as cookies to enable the necessary functionality of the site, including analytics and personalization. You can change your settings at any time or accept the default settings.
Necessary cookies help make a web page usable by activating basic functions such as page navigation and access to secure areas of the web page. The website cannot function properly without these cookies.
Personalization
Personalization cookies allow the website to remember information that changes the way the page behaves or the way it looks, such as your preferred language or the region in which you are located.
Analysis
Statistical cookies help web page owners understand how visitors interact with web pages by collecting and providing information anonymously.
Marketing
Marketing cookies are used to track visitors on web pages. The intention is to show ads relevant and attractive to the individual user, and therefore more valuable to publishers and third-party advertisers.